Tras el gran éxito evolutivo de la estructura del cuerpo de las serpientes

Investigadores de la Universidad de Yale llevaron a cabo el primer estudio genético y anatómico en profundidad de docenas de especies de serpientes, vivas y extintas, con lo cual llegaron a una estimación de la conducta y rasgos físicos de esta antigua criatura.

Los resultados ponen de relieve el gran éxito evolutivo de la estructura del cuerpo de serpiente. Se conoce que existen más de 3.000 especies en todos los continentes (excepto la Antártida), pero, estos reptiles, no han cambiado mucho en más de 100 millones de años.

Siempre ha inquietado a los científicos que a pesar de no tener patas, las serpientes son expertas sobrevivientes en una variedad de hábitats como desiertos, bosques, entornos acuáticos, en los árboles, bajo tierra, etc..

Por lo cual, varias preguntas sobre la evolución han persistido durante décadas: ¿Dónde se originaron, en tierra o en los océanos? ¿Cómo llegaron a evolucionar sin extremidades? ¿Cómo fue la dieta las primeras serpientes?

Los investigadores, trabajando con 73 especies de serpientes vivas y extintas, compararon el ADN de 18.000 pares, así como 766 características anatómicas. Los fósiles recientes encontrados - incluyendo tres ejemplares bien conservados recuperados en la última década, dos de Argentina y uno de Wyoming - ofrecieron una mejor visión de las primeras serpientes. Los resultados sugieren una criatura que era nocturna, no tenía las mandíbulas flexibles como las serpientes de hoy, probablemente vivió y cazado por encima del suelo (en lugar de madriguera, como algunos científicos habían sugerido), y se originaron en lo que hoy es América del Sur. Además, la serpiente, como se esperaba, parece haber tenido patas traseras vestigiales.

Las patas eran una de las principales características de los que dependían científicos en la construcción de relaciones posibles. Se pensaba que las boas estaban fuera del linaje moderno de serpientes porque sus predecesores tenían extremidades traseras, se pensaba que estaban, de acuerdo con este análisis, más estrechamente relacionados con la protoserpiente.

Por qué las serpientes perdieron por completo sus patas en el tiempo, así como por qué se han mantenido igual durante tanto tiempo, siguen siendo cuestiones abiertas. Algunos expertos piensan que el hecho de no tener patas dio a las serpientes una ventaja para la caza desde la madriguera. Otra investigación reciente sugiere algo completamente diferente: que el cuerpo de la serpiente es el modelo del cual se originaron los lagartos y otros reptiles de cuatro patas; en realidad las piernas evolucionaron de forma sencilla de la serpiente. Los debates, sin duda, está evolucionando a medida que se descubren nuevos fósiles.

Respecto al proceso evolutivo de estos reptiles, los investigadores afirman que se separaron del resto de los reptiles hace 130 millones de años. Esto difiere de la mayoría de las estimaciones aceptadas, pues muchos sostienen que ha ocurrido hace alrededor de 100 millones de años. También sugieren que las serpientes evolucionaron por completo en la tierra, a pesar de las similitudes anatómicas claves con los reptiles extinguidos que vivieron en el océano llamados mosasaurios.

Si bien este estudio, opinan algunos científicos, es el más completo y riguroso sobre los orígenes de la serpiente hasta la fecha, está lejos de ser completa; falta conocerse mucho sobre las extintas así como a conocer el ancestro común de las que existen en la actualidad. (Con información de The Smithsonian.com)