Los árboles tropicales en los Andes caminan hacia la extinción

 

Un estudio internacional dirigido por biólogos tropicales de la Universidad de Miami reveló que los árboles tropicales están migrando hacia arriba para escapar del cambio climático, pero no lo suficientemente rápido.

En el estudio más completo de su tipo, se descubrió que los bosques tropicales y subtropicales en las montañas de los Andes Sudamericanos están respondiendo al incremento de las temperaturas al migrar a zonas más altas y frías, pero no son lo suficientemente rápidos para evitar la pérdida de biodiversidad, el colapso funcional, o incluso, la extinción.

El estudio, publicado recientemente en la revista Nature, confirmó por primera vez que, como muchas otras especies de plantas y animales en todo el mundo, los árboles de los bosques andinos y amazónicos de Colombia, Ecuador, Perú y el norte de Argentina se han estado moviendo hacia arriba. Pero a diferencia de las especies de los bosques templados o boreales del mundo, que están mucho más acostumbrados a los dramáticos cambios estacionales de temperatura, los árboles tropicales se encuentran con obstáculos ambientales en las zonas más altas y frías que frustran su migración y amenazan su supervivencia.

Así, los investigadores de la UM, Belén Fadrique y Kenneth J. Feeley, unieron fuerzas con otros 18 investigadores de todo el mundo para crear una nueva base de datos que rastrea los medios de vida de miles de árboles de las tierras altas en 186 parcelas de tierra situadas en lo que se conoce como el Hotspot de Biodiversidad de los Andes Tropicales.

Sentados en alturas de 300 a más de 3,000 metros sobre el nivel del mar, la mayoría de las parcelas son aproximadamente del tamaño de un campo de fútbol americano y han sido inventariadas varias veces en las últimas dos décadas. En conjunto, estas parcelas forestales contienen una diversidad sorprendente: un total de 120 familias de plantas diferentes, 528 géneros y más de 2,000 especies de árboles. Esto es más especies de árboles que las que se encuentran en todos los Estados Unidos y Canadá combinados, informaron los científicos.

Mediante el uso de técnicas de modelado recientemente desarrolladas que combinaron los datos de todas las parcelas en un único análisis integral, los investigadores confirmaron que, a medida que las temperaturas en los Andes aumentan debido al calentamiento global, los árboles tropicales amantes del calor buscan condiciones más óptimas al migrar a zonas más altas y más frías. En consecuencia, la abundancia de estas especies amantes del calor o termófilas en las parcelas de estudio aumenta con el tiempo, mientras que, en contraste, la abundancia de especies amantes del frío está disminuyendo.

Los investigadores también se sorprendieron al saber que, si bien este fenómeno de termofilización está generalizado en los Andes, las tasas de cambio en la composición de los bosques no son uniformes en las elevaciones. Sugieren que los obstáculos (denominados “ecotonales”) pueden ser, en parte, responsables. En otras palabras, a medida que las especies andinas son empujadas hacia arriba por el aumento de las temperaturas, pueden encontrarse rápidamente fuera de sus zonas de confort a medida que otros aspectos de su hábitat, como la lluvia y la cubierta de nubes, se vuelven intolerables.

Debido a los hallazgos de este estudio que tiene alcance continental, los científicos consideran que los bosques andinos deben agregarse a la lista creciente de ecosistemas y especies que carecen de la capacidad de responder rápida y cohesivamente al cambio climático y, por lo tanto, enfrentar un alto riesgo de extinción y pérdida de biodiversidad, y colapso funcional.

Finalmente, Feeley y sus coautores esperan realizar estudios de seguimiento que analicen cómo los factores climáticos afectan a especies andinas específicas, muchas de las cuales aún no han sido identificadas o nombradas, y cuáles serán las consecuencias si se pierden.

Señalaron, además, que los bosques tropicales son uno de los actores más importantes en el ciclo mundial del carbono en el mundo; dado que ralentizan el cambio climático al eliminar una gran cantidad de carbono de la atmósfera al usarlo en su crecimiento. Así que cuanto más rápido ocurra el cambio climático, más rápido perderemos nuestros bosques tropicales, lo que a su vez significa que el cambio climático se producirá aún más rápido.