Considerado como el más completo y más antiguo observatorio solar de América y el mundo, Chankillo, ubicado en Casma, Ancash, presenta trece torres que están dispuestas para seguir el desplazamiento del sol durante todo el año. Esto, no solo permitió medir el tiempo con gran precisión, sino que fue la razón por el cual los arqueólogos lo reconocieran como observatorio solar.
Fue construido hace aproximadamente 2,200 años por una civilización muy organizada, cuyo nombre aún se desconoce, pero que no está relacionada con las culturas preincas. Su utilidad, aparentemente como calendario solar, pudo haber sido para la agricultura, para conocer el cuándo de la siembra y la cosecha.
Hay muchas razones para pensar que haya sido usado para asegurar la tenencia de granos y otros productos agrícolas. Así lo sugieren sus trece torres que están dispuestas para seguir las posiciones del Sol. Esta civilización pudo conocer las estaciones y decidir cuándo proceder a la siembra. Además, es posible deducir esto, dado que en toda la zona andina se desarrolló una agricultura muy próspera, que fue posible gracias al conocimiento del ciclo del sol. Esto era muy común en esos tiempos.
Sin embargo, muchos arqueólogos prefieren decir que Chankillo ha sido una edificación para ceremonias de culto al sol. Así, los científicos afirman que, dicha civilización, rindió culto al Sol casi 2 mil años antes que los Incas. Pero, recalcan, que esto es solo es una suposición, puesto que falta conocer su modo de vida, religión, su lengua, etc, y otros detalles de esta cultura.
Además, los científicos han destacado los fines astronómicos del sitio debido a que constaron que sus torres marcaban cuatro puntos solares y algunos días del año de importancia. Con ello, notaron que, a diferencia de otros sitios reconocidos como observatorios alrededor del mundo, que marcan con precisión sólo una o dos fechas, el observatorio de Chankillo, marca todo el ciclo anual del Sol. Esto lo hace único y ha sido una de las razones por lo cual se considera que, estas ruinas, debe convertirse en Patrimonio de la Humanidad.
También se ha observado detalles que indican que el sitio fue atacado por comunidades o culturas rivales. Se ha notado que su templo principal fue destruido y enterrado, y todo el lugar fue abandonado repentinamente. Falta a un por descubrir mayores detalles de la civilización que la construyó, cómo transcurrieron sus días y cómo llegó a su fin.
Actualmente, el Ministerio de cultura está trabajando para que el sitio se declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO. Por esta razón está implementando un plan de gestión para su conservación y protección de sus atributos de valor universal requeridos para su inclusión en la Lista del Patrimonio Mundial.