Una molécula sencilla, sintética, basada en un azúcar, que inhibe eficazmente la inflamación bronquial que surge con el asma ha sido descubierto por un equipo internacional de investigadores que fue liderado por el Instituto Max Planck.
El estudio, realizado en ratones, demostró que esta sustancia (disulphated ácido idurónico) impide el desarrollo de procesos que resultan en la secreción de moco, el estrechamiento de las vías respiratorias y, en última instancia, la falta de aliento. Sin embargo, los investigadores señalan que, antes de que puede ser utilizado en los seres humanos, la sustancia requerirá de un mayor desarrollo y, su eficacia, tendrá que ser probado en ensayos clínicos.
El asma es una de las enfermedades respiratorias comunes que está afectando a un número creciente de personas. En los países industrializados y emergentes, el número de pacientes con la enfermedad ha aumentado de manera constante durante los últimos 30 años, informan los científicos.
Las personas que sufren de esta enfermedad de manera crónica, sufren una reacción alérgica que, por lo general, da lugar a la tensión en el pecho, dificultad para respirar y tos. En estos episodios, los procesos inflamatorios en los bronquios, que implican la constricción de la tráquea y la secreción de moco, juegan un papel crucial. Es precisamente el área del cuerpo a la que se orienta la sustancia descubierta, sostienen.
También se ha observado que no ocasionaron ningún tipo de efecto secundarios en los ratones. Pero, insisten, por encima de todo, los ensayos clínicos en seres humanos deben demostrar si este candidato descubierto cumple con la promesa que mostró en las pruebas con estos animales. Los investigadores ya se han puesto en contacto con los investigadores médicos con el fin de confirmar esto, se informó.
En la investigación también participaron la Freie Universität Berlin y el Sanford-Burnham Medical Research Institute en La Jolla, California.