La justicia llega para unas ranas cantoras: su canto era atribuido a la serpiente shushupe

Llega a medir más de 3,5 m de longitud, la Shushupe, cuyo nombre científico es Lachesis muta, es la víbora más grande del hemisferio occidental. Los habitantes de la Amazonía peruana dicen que persigue a sus víctimas y que, para librarse de su persecución, tiene que ir dejando sus prendas de vestir en el camino para que la víbora lo ataque y, así, la víctima pueda ganar tiempo en su huida.

Otra de las leyendas que se ha extendido entre los nativos de la región amazónica y Centroamérica es que esta serpiente canta.

Los investigadores conocían de estas cualidades atribuidas a la shushupe debido a numerosos informes de los mismos nativos, que no tenían relación y eran muy desconcertantes. Pues, es bien sabido que las serpientes no tienen capacidad ni ‘talento’ para el canto. Esto es lo que motivó a los científicos a trabajar para desenredar finalmente el mito. Investigadores de la Amazonía de Ecuador y Perú, llevaron a cabo un trabajo de campo en el que revelaron que el canto que se le atribuía a la shushupe no era de ella. El canto era la llamada de unas ranas que viven en troncos huecos en el bosque.

Mientras que estas serpientes se llevaban el crédito y aterrorizaban a los hombres con sus supuestos cantos, estos anfibios estaban casi completamente desconocidos. Pero, como no hay mal que dure cien años, la justicia llegó para reconocer el talento cantor de estas ranas.

Los investigadores, al escuchar el característico canto atribuido a la serpiente, se apuraban en ubicar a la responsable pero, para sorpresa de ellos, se encontraron con dos especies de ranas del género Tepuihyla en pleno concierto a capela.

Una de estas ranas de árbol es una especie nueva a la que llamaron Tepuihyla shushupe. La palabra shushupe es utilizado por los nativos para referirse a esta serpiente que suele encontrarse en matorrales y que, tan solo con su tamaño, aterroriza al que tiene la mala fortuna de encontrarse con ella.

Los cánticos de las ranas son altamente inusuales ya que se parecen a una risa parecida a lo que emiten aves en voz alta. Todavía no se sabe debido a qué la gente llegó a asociar los cánticos de las dos especies de rana con la serpiente.

Los resultados de este estudio se publicaron en la revista ZooKeys. Este fue un trabajo colaborativo entre científicos de la Universidad Católica del Ecuador, el Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana, el Museo Ecuatoriano de Ciencias Naturales, y la Universidad del Estado de Colorado, EE.UU..